El aguacate se ha vuelto una pieza clave en la alimentación de los estadounidenses. La demanda estadounidense de aguacates ha aumentado de manera constante durante las últimas dos décadas y el consumo per cápita de aguacates se ha triplicado desde 2001 a 8 libras por persona en 2018.
En 2007, México superó a Chile como proveedor dominante, y para 2018 representó el 89 por ciento de las importaciones de aguacate fresco. Aun así, hay muchos países que se encargan de cubrir la demanda restante, tal es el caso de Perú.
Aunque la industria de la palta peruana ha experimentado un desarrollo notable, seguirá creciendo. En la temporada 2021, las exportaciones de aguacate Hass peruano podrían aumentar en un 10% en volumen sobre las 360,000 toneladas enviadas este año, dijo Daniel Bustamante Canny, presidente de la Asociación de Productores de Aguacate Hass del Perú (Prohass).
Para esto, Perú tiene que enfrentarse a la sobreoferta internacional de otros mercados como Sudáfrica, México, Estados Unidos y Colombia. Además, deben de mantener altos estándares de calidad para conservar su buena imagen en los mercados a los que exporta.
De modo que, más que el factor pandemia, es la ardua competencia internacional la que presiona al exportador. “Sin embargo, con un mejor ordenamiento interno de la oferta de palta se puede ayudar a reducir el impacto en los mercados”, comentó Daniel Bustamante Canny.
Fuente:
FreshPlaza y USDA