La investigación es una de las actividades más importantes para la industria, ya que gracias a ella es posible desarrollar distintas herramientas que favorecen los procesos de producción, además de encontrar hallazgos favorecedores para el sector y los consumidores. Recientemente el Journal of the Academy of Dermatology ha publicado una investigación en la cual se encontró que el consumo de uvas protege contra el daño cutáneo ultravioleta. [metaslider id=5544]
El estudio fue realizado por la Universidad de Alabama, Birmingham y dirigido por el investigador principal Craig Elmets, M.D. El procedimiento se llevó a cabo dela siguiente manera:
Se abordó el impacto de consumir uva entera en polvo, equivalente a 2,25 tazas de uvas por día, durante 14 días contra el fotodaño de la luz ultravioleta. La respuesta de la piel de los sujetos a la luz ultravioleta se midió antes y después de consumir uvas durante dos semanas, determinando la dosis umbral de radiación ultravioleta que indujo un enrojecimiento visible después de 24 horas: la dosis mínima de eritema.
En los resultados obtenidos, los sujetos del estudio mostraron una mayor resistencia a las quemaduras solares y una reducción en los marcadores de daño UV a nivel celular.2 Se cree que los componentes naturales que se encuentran en las uvas conocidos como polifenoles son responsables de estos efectos beneficiosos.[metaslider id=5512]
En los hallazgos se encontró que el consumo de uva funcionó de manera protectora, se tuvo que dar más exposición a los rayos UV para causar quemaduras solares luego del consumo de uva con MED aumentando en promedio un 74,8% .3. los análisis de las biopsias arrojaron que la piel mostró que la dieta rica en uvas se asocia con una disminución del daño del ADN, lo que respetan menos muertes de células de la piel y una reducción de los marcadores inflamatorios que si no se controlan, juntos pueden afectar la función de la piel y potencialmente pueden conducir a cáncer de piel.
“Vimos un efecto fotoprotector significativo con el consumo de uva y pudimos identificar las vías moleculares por las que se produce ese beneficio, mediante la reparación del daño del ADN y la regulación a la baja de las vías proinflamatorias”, mencionó el Dr. Elmets. “Las uvas pueden actuar como un protector solar comestible, ofreciendo una capa adicional de protección además de los productos de protección solar tópicos”.
Fuente: Produce Blue Book
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