En el informe “El sector de procesado de alperujo. Posibilidades de un potencial colapso financiero y operativo”, de Juan Vilar Consultores a petición de la Asociación Nacional de Empresas de Aceite (ANEO), se expone la expansión de la superficie olivar y su aumento en la producción.
Existe un riesgo económico y social de interrumpirse la cadena de trabajo en el procesamiento de 10 millones de toneladas de alperujo (subproducto de las almazaras).
De acuerdo al informe esta interrupción involuntaria de la cadena de forma total o parcial sería debido a la falta de capacidad o exceso de volumen de producto impactaría a el resto del sector, pues por cada tonelada se perderían casi 5 euros lo que resultaría en una inviabilidad de esta actividad.
Actualmente, existen 54 plantas de procesado de alpeorujo, cuyos ingresos provienen principalmente de la venta del aceite, del hueso y del orujillo, que según los datos en estos momentos cuentan con las cotizaciones más bajas de la historia y no alcanzan a superar los gastos de producción.
Esta situación es delicada para la ANEO, ya que según sus datos la actividad “resultaría deficitaria” y los daños serían mayor a los 11 millones de euros por día si se cumplen las condiciones del estudio.