Existen muchas variables por las cuales un cliente puede comprar o no comprar frutas o verduras, una de estas es la apariencia del producto, existen mercados más exigentes en este aspecto, por ejemplo, el mercado americano es más demandante que el mercado latino. Otros factores pueden ser la conveniencia o incluso factores externos como que es un producto que fue recomendado por un amigo o un familiar.
Otro de los factores que más influyen en las decisiones de compras es el de la salud y bienestar. Según un informe realizado por la FMI en el mercado americano, casi el 50% de los consumidores se apegan a una forma específica de comer, incluidas dietas para bajar de peso o para una mejor salud y estilos de vida que abarcan alimentos orgánicos.
Algunos de estos consumidores buscan beneficios muy específicos, por ejemplo, como los que ayudan a mejorar su microbioma intestinal, como el brócoli y el mango, o las frutas y verduras que aumentan la inmunidad, como la remolacha, la espinaca o los arándanos, entre otros.
Además de la salud y el bienestar, los consumidores quieren productos que sean convenientes para su estilo de vida, ya sean frutas y verduras precortadas y empaquetadas o productos que se alineen con su interés en las prácticas de agricultura orgánica.
La personalización no solo se extiende al individuo, sino también al hogar del comprador. Es decir, muchos de los consumidores de hoy están tratando de satisfacer las diversas necesidades de sus familias, comprando productos para individuos dentro de su hogar en lugar de cómo un grupo.
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Fuente: The Produce News
